La comunidad aragonesa, ha perdido multitud de puestos de trabajo en los últimos años, y los que se mantienen, en algunos casos, lo hacen en condiciones de precariedad. Y es que los jóvenes aragoneses ya no saben hacia dónde dirigir sus vidas, y el futuro, se les presenta cada vez más incierto. Las profesiones más demandadas en Aragón, igual que en el resto del país, son las relacionadas con la informática y las nuevas tecnologías de la información, y de hecho, pero la comunidad, apenas es capaz de cubrir el número de plazas universitarias, y a día de hoy, también existe una enorme necesidad de cubrir ciertos puestos de trabajo, que se mantienen desocupados. Pero parece que la gente joven se decanta por otras especialidades, peor pagadas, y con menos demanda.