No es lo mismo amueblar nuestra casa que decorarla. Lo primordial y en lo primero que solemos pensar cuando nos mudamos es en amueblarla. En ese sentido, la decoración juega un papel secundario ya que no es imprescindible para hacer una vida normal. Sin embargo, sà que tiene su importancia a la hora de conferir personalidad y buen gusto en nuestra vivienda.
Un aragonés que se precie cuida de su hogar y trata de proporcionarle los mejores atributos. Una casa desvela muchos de los secretos de las personas que la habitan, y por eso darle una imagen cuidada y trabajada es importante para que todo aquel que nos visite se lleve una buena impresión tanto de nosotros como de nuestro gusto y toque personales.
En mi caso, siempre he tenido en cuenta todo este tipo de cuestiones que os comento. Procuro que mi hogar estĆ© cuidado y que tenga un estilo moderno pero no demasiado llamativo, y eso es lo que le quise imprimir a la nueva casa que comprĆ© en Zaragoza cuando me marchĆ© allĆ a vivir desde Teruel por motivos de trabajo. Empezaba desde cero pero con las ideas muy claras respecto a lo que querĆa.
Como desde hacĆa tiempo sabĆa que tendrĆa que salir de Teruel y continuar mi vida en otro lado, ya me habĆa encargado de estar informado acerca las mejores tiendas online para amueblar y decorar hogares. Mi opción preferente era www.circulomuebles.com. Su estilo, la gran calidad de los muebles que ofertaba y el mĆ”s que aceptable precio al que lo hacĆa me tenĆan enamorado. Fuera cual fuera mi nueva vivienda, tenĆa claro en quiĆ©n debĆa confiar para dotarla de lo mejor.
Cuando me informaron en mi empresa de que Zaragoza iba a ser mi siguiente destino y adquirĆ la nueva casa, contactĆ© con CĆrculo Muebles de manera inmediata. En pocas semanas la casa quedó perfectamente amueblada, tal y como yo buscaba. Sin embargo, a pesar de contar con unos muebles perfectos y que me habĆan salido muy baratos, notĆ© que faltaba algo. Esa decoración de la que os hablaba en los primeros pĆ”rrafos de este artĆculo se podĆa trabajar mĆ”s en mi nuevo hogar maƱo. Por eso volvĆ a confiar en esa tienda de muebles que tanta alegrĆa me acababa de dar.
Una vivienda ātopā
Gracias a los artĆculos de decoración con los que me hice, la casa quedó dispuesta de una manera espectacular. Tres alfombras cubrieron el suelo del salón, el vestĆbulo y mi habitación. Las paredes, que lucĆan desnudas hasta entonces, se vieron acompaƱadas de cuadros que mostraban varios de los lugares mĆ”s espectaculares y maravillosos de los que podemos disfrutar en la Tierra.
Cuando todo quedó exactamente como yo querĆa, di luz verde a las visitas de mis padres y amigos, que ya estaban deseosos de ver con quĆ© les iba a sorprender en mi nuevo lugar de residencia en Zaragoza. AprovechĆ© para organizar una cena con unos primero y con otros despuĆ©s. La reacción fue, sin embargo, la misma. A mis padres les sorprendieron los armarios, espaciosos y bien distribuidos. Entre mis amigos triunfaron los cuadros que habĆa comprado para decorar. Pero tanto unos como otros estaban de acuerdo en que habĆa tenido buen gusto a la hora de darle mi toque personal al lugar.
El momento mĆ”s divertido en ambos casos fue cuando llegó la hora de hablar del precio. Ni mis padres ni mis amigos me creĆan cuando les comentĆ© lo poco que me habĆa costado haber dotado a la vivienda de todo aquello. Visiblemente sorprendidos, pude ver en algunas de aquellas caras el deseo de contactar con la tienda de muebles para informarse acerca de los diferentes artĆculos y su precio. Y estoy seguro de que alguno de ellos ya lo ha hecho.